Todos sabemos que
Hay dos maneras de recibir el cuerpo de Cristo, la comunión sacramental y la comunión espiritual.
Recordemos siempre que para entrar en comunión con Cristo es necesario estar en estado de gracia. Si no lo estamos, debemos recurrir al sacerdote, confesarnos y dejarnos guiar por él para poder alcanzar la reconciliación.
El cristiano debe vivir en estado de gracia. No es cierto que haya que estar en estado de gracia solamente para formar la fila de
Donde y como puede recibirse la comunión espiritual
El lugar propio para recibir la comunión espiritual es
Creo, Jesús mío, que estás presente
en el Santísimo Sacramento del Altar;
te amo sobre todas las cosas
y deseo recibirte dentro de mi alma.
Mas, no pudiendo hacerlo ahora sacramentalmente,
ven espiritualmente a mi corazón.
No permitas, Señor,
Que nunca me separe y aparte de ti.
Amén.
Se hace un breve silencio mirando el sagrario y luego se reza:
Como si ya te hubiera recibido, te abrazo en mi corazón y me uno todo a Ti. No permitas que nunca me separe de Ti.
Por tanto existen dos comuniones reales con el Cuerpo de Cristo y las dos tienen abundante Gracias:
En una Visión Mística lo manifestó el Señor a su sierva Sor Paula Maresca, fundadora del Monasterio de Santa Catalina de Siena, en Nápoles, mostrándole (como en su vida se refiere) dos vasos preciosos, de oro el uno y el otro de plata; y diciéndole que en el de oro conservaba sus comuniones sacramentales, y en el de plata las espirituales. Por su lado a la beata Juana de
Recibir a Cristo en Comunión Espiritual es una verdadera comunión.
Las personas que se aman muchas veces están imposibilitados de estar físicamente unidos, pero el amor que todo lo puede nos une en el espíritu. Siempre hay una unión espiritual con la persona que amamos.
Por eso la comunión espiritual es un encuentro y una unión espiritual con una persona a la que amo mucho y se que mucho me ama: Jesús.
Para crecer en el amor a Dios todos pueden practicar la comunión espiritual.
Una persona puede hacerlo cada vez que entra en una iglesia, en cada Visita al Santísimo Sacramento, y en cada Misa que a la que vaya.
Durante la misa se hace poniéndose de rodillas y recitando interiormente la oración de la comunión espiritual en el momento en que se está distribuyendo la eucaristía a los demás fieles, de esa manera yo estoy en comunión con Jesús y con mis hermanos en el mismo momento y en el mismo lugar.
Asimismo puede hacerse también antes de que comience la misa, como una preparación espiritual de deseo. Deseando ardientemente al cuerpo de Cristo. O bien finalizada la misa quedándome un ratito más en comunión con Jesús Eucaristía.
La comunión espiritual se puede definir como comunión de deseo: un deseo ardiente del cuerpo y sangre de Cristo, pero no entraremos en detalles. En el próximo número de la revista escribiré con más detenimiento a cerca de la comunión espiritual como comunión de deseo.
Esta devoción es mucho más provechosa de lo que algunos juzgan, y al mismo tiempo facilísima. Decía la beata Juana de
La comunión espiritual es un puro acto de amor, desde mi corazón hacia el Corazón Sagrado de Jesús. Y cuando hay amor de verdad hay comunión.
Por eso es bueno tener siempre a mano la oración para hacer la comunión espiritual. Muchos de nosotros la llevamos en
Tenga se en cuenta según nos enseña el Enchiridium de Indulgencias (libro en el que están enumeradas todas las posibilidades de obtener indulgencias) que se ganan 3 años de indulgencia cada vez que se practica y indulgencias plenarias si la practicamos un mes entero todos los días.
Y es un acto personal en la cual yo me entrego todo entero a Jesús Eucaristía y Jesús Eucaristía se entrega todo a mí. Este acto íntimo e individual que hace cada uno con Jesús tiene efectos comunitarios. Toda comunión es un acto individual y libre cuyos frutos involucran a toda la comunidad y así la comunión es un acto eclesial, un acto comunitario.
La comunión espiritual como oración, como acto libre y de amor a Jesús Eucaristía tiene dos partes:
Es un acto de fe en la presencia real de Jesús en
Y es un acto de Deseo a Jesús Eucaristía.
Veamos:
Como acto de fe, la oración de la comunión espiritual comienza diciendo:
Creo, Jesús mío, que estás presente
en el Santísimo Sacramento del Altar;
Y como todo acto de fe es un acto de amor:
Creo, Jesús mío, que estás presente
en el Santísimo Sacramento del Altar;
te amo sobre todas las cosas
La segunda parte es un acto de deseo. Desear recibir el cuerpo y la sangre de Cristo. Un deseo auténtico y profundo no un simple ¡como desearía tomar la comunión! o sentir, deseo tomar la comunión. No es lo mismo decir desearía tomar la comunión que decir deseo tomar la comunión, y tampoco es lo mismo decir deseo tomar la comunión que decirle a Jesús deseo vivir en comunión.
Pero el más perfecto de todos los deseos es decirle a Jesús Eucaristía
“Te deseo Señor. Que nunca me separe de ti”
A continuación les regalo la oración completa una vez más, para que puedan recortarla y llevarla siempre contigo, en la cartera, en la billetera, en
Padre Osvaldo Ballarre